CCOO de Industria | 23 abril 2024.

La Ley de Debida diligencia puede ser una ley histórica, pero tiene que cumplir unas mínimas exigencias para su efectividad

  • Para CCOO de Industria es necesario la aplicación de toda la normativa internacional, la necesidad de transparencia, la participación sindical, así como herramientas para la resolución de conflictos

Este jueves Víctor Garrido, Responsable de Acuerdos Marco de CCOO de Industria ha participado en el seminario del Pacto Global de Naciones Unidas sobre cómo garantizar la debida diligencia, englobado dentro de la agenda de empresas y derechos humanos.

02/06/2023.
Víctor Garrido en el seminario sobre Debida diligencia

Víctor Garrido en el seminario sobre Debida diligencia

Esta participación se enmarca en el marco global desde Argentina y se plantearon propuestas y experiencias desde Argentina y España. La principal idea fue compartir espacios y posiciones dentro de este encuentro con distintos actores para la toma de conciencia en derechos humanos, trabajo decente y legislación laboral. Ese mismo día, se producía la votación en el Parlamento Europeo de la Ley de Debida diligencia en materia de sostenibilidad cooperativa. 

Victor Garrido considera que esta votación favorable a la Ley de debida diligencia es un gran paso adelante hacia una legislación que impida que las empresas abusen de los trabajadores y trabajadoras, así como del planeta en cuestiones medioambientales. 

Para Garrido la Ley de Debida diligencia puede ser una ley histórica sobre responsabilidades en materia de derechos humanos, pero queda pendiente el texto final de esta Ley, después de que se concilie entre el Consejo de la Unión Europea y la Comisión Europea. 

Es cierto que la directiva europea sobre Debida diligencia, podría impulsar mejor la rendición de cuentas de las empresas, pero en la prevista no se incluyen las pequeñas y medianas empresas y todavía está pendiente la obligación de los CEOs de rendir cuentas. En este caso solo se aplica a empresas con más de 500 empleados y con un volumen de negocio superior a 150 millones de euros. 

Esta nueva normativa va a exigir a las empresas que apliquen la diligencia debida a cuestiones relativas a derechos humanos y medio ambiente en sus operaciones y en sus cadenas de suministros, integrando dentro de sus sistemas de gestión las políticas de debida diligencia: gestión de riesgos, identificación y evaluación de impactos, corrección y mitigación de éstos, así como tener un mecanismo de reclamación para los trabajadores y trabajadoras que tenga un problema en alguna de las fábricas de sus cadenas globales de valor y supervisar la eficacia de esas medidas para que sean reales. Por lo tanto, CCOO así como el resto de sindicatos deben participar en la implementación de la debida diligencia.

Víctor Garrido, además comentó las experiencias y cómo se trataba de aplicar la debida diligencia en las condiciones laborales y de derechos humanos de las personas a través de la construcción de acuerdos marco globales fuertes, así como las mínimas exigencias que se han planteado desde CCOO de Industria respecto a los acuerdos marco internacionales. 

Para CCOO de Industria, estas exigencias son la inclusión de toda la normativa internacional con convenios específicos de la OIT, así como la integración del convenio 190. La necesidad de transparencia, es decir, que se dispongan de los listados de todas las cadenas globales de valor, sus cadenas de suministro y todas las fábricas y sus ubicaciones. Una información prioritaria no solo para el sindicalismo de los países de las empresas, sino para el sindicalismo de los países en donde se encuentra su cadena de producción. 

Otra de las exigencias sería la participación sindical, dando el derecho al acceso sindical a todos los centros de trabajo, tanto las estructuras sindicales del país, como de los países de producción, y el reconocimiento como interlocutor a todo el sindicalismo. 

La siguiente exigencia de CCOO de Industria es la existencia de un mecanismo eficaz de resolución de conflictos. Y por último, que las empresas tengan planes de trabajo que incluyan las diferentes actividades que implican a los sindicatos en los países de producción, conjuntamente con los países de origen de las empresas para garantizar la aplicación de debida diligencia. 

Para CCOO de Industria estos contenidos son esenciales y cuya ausencia convierte a la normativa en mera publicidad para las empresas, el llamado “Green Washing”.