CCOO de Industria | 3 julio 2024.

El 17% de la plantilla de Iberdrola aumenta su sueldo un 10% en la nómina de junio tras la demanda de CCOO y UGT

  • El incremento salarial, que afecta a más de 1500 personas trabajadoras y a las incorporaciones futuras, es consecuencia de la demanda de CCOO y UGT por la que, el pasado 29 de febrero, la Audiencia Nacional declaró ilegal la doble escala salarial en Iberdrola.
  • El convenio firmado por SIE, ATYPE y USO estableció una doble escala salarial un 10% inferior para los trabajadores/as ingresados a partir del 1 de enero de 2021.

Por el momento, la aplicación tiene efectos desde el pasado 1 de marzo de 2024. La imposibilidad de alcanzar un acuerdo con la Dirección respecto de la fecha de retroactividad, llevará de nuevo a UGT y CCOO ante la Audiencia Nacional buscando declarar la aplicación de la sentencia desde el 1 de enero de 2021.

01/07/2024.
Concentración ante la sede de Iberdrola

Concentración ante la sede de Iberdrola

La firma del vigente VIII Convenio Colectivo de Iberdrola por parte de las organizaciones SIE, ATYPE y USO en otoño de 2020 suponía la aplicación de una doble escala salarial y la consecuente reducción salarial del 10% para todo el personal ingresado en Iberdrola a partir del 1 de enero de 2021.

CCOO y UGT acudieron en noviembre de 2023 a la Audiencia Nacional para que se declarase ilegal la tabla pactada por los sindicatos firmantes dado que el acuerdo suponía “una disparidad retributiva injustificada y perpetua que se establece entre los trabajadores/as incluidos en un mismo rango y ámbito de aplicación, motivada únicamente por su fecha de ingreso”.

La Audiencia Nacional, dio la razón a UGT y CCOO determinando que “queda acreditada la existencia de una doble escala salarial ilegal por no encontrarse justificada” y proyectar “hacia el futuro estableciendo dos escalas salariales cuya justificación no se nos parece razonable”.

La sentencia, ejecutable sin perjuicio de su recurso ante el Tribunal Supremo, ha supuesto -con efectos del pasado 1 de marzo- que más de 1500 trabajadores/as actuales de los 8900 que integran la plantilla en España y todas las futuras incorporaciones incrementen su salario un 10% a partir de la nómina de junio.

De nuevo a la Audiencia Nacional ante la falta de acuerdo en la retroactividad.

Desde que se conoció el fallo de la AN, CCOO y UGT han intentado alcanzar un acuerdo sobre la retroactividad de la sentencia y el recurso en el Tribunal Supremo interpuesto por la empresa.

El acuerdo ha sido imposible por las exigencias inasumibles de la dirección de Recursos Humanos, lo que llevará de nuevo a Iberdrola ante la AN para que se declare la retroactividad desde el 1 de enero de 2021 fecha de entrada en vigor del Convenio (actualmente retroactividad: 1 marzo de 2024).

De volver a dar la razón la AN a UGT y CCOO, ello supondrá para la Corporación otros de 2,5 millones de euros.

CCOO y UGT litigaremos ahora para establecer la retroactividad total de la sentencia desde la fecha de incorporación de la persona trabajadora y resarcir por completo la pérdida salarial ocasionada a los afectados/as por una discriminación que nunca debió suceder, menos aún, en una empresa con más de 5000 M€ de beneficio previstos para este 2024. La segunda empresa del IBEX-35 por capitalización no puede plantear una estructura salarial discriminatoria para más de 1500 trabajadores/as de su plantilla, el 17% del total.

Con este logro sin paliativos, UGT y CCOO se reafirman en la unidad sindical y la defensa de los intereses de todas las personas trabajadoras de Iberdrola sin distinciones injustificadas de ningún tipo, y menos, por nacimiento, fecha de ingreso, sexo, raza o condición. 

Alta conflictividad y ambiente laboral

Esta actuación se suma a otras llevadas a cabo en los últimos años, encabezadas por CCOO y UGT como una revisión salarial justa. A pesar del alto entorno inflacionista y los altísimos beneficios, Iberdrola mantiene sobre su plantilla una congelación salarial de facto con revisiones salariales máximas del 0,7%.

Esta reivindicación está suponiendo una conflictividad sin precedentes, con importantes y continuas movilizaciones por parte de la plantilla que han alcanzado incluso la pasada Junta General de accionistas de Iberdrola, en una de las primeras empresas del IBEX con miles de millones de beneficio neto anual.

La incapacidad para alcanzar acuerdos y acercar posturas por parte de la dirección de RRHH ha deteriorado el ambiente laboral hasta niveles nunca vistos en Iberdrola.

Sin embargo, la Compañía niega permanentemente tal deterioro en las relaciones laborales en sus comunicaciones internas, lo que es un evidente choque con la realidad que está contribuyendo aún más a aumentar el malestar de una plantilla plenamente consciente de la pérdida de poder adquisitivo y la degradación de sus condiciones laborales, año tras año, a pesar de los enormes beneficios.