CCOO de Industria | 28 marzo 2024.

Para muestra, el metal

  • Artículo de opinión de Ana Oller, responsable de Política Sindical de CCOO de Industria

26/10/2022. CCOO de Industria
Movilización durante una de las siete jornadas de huelga que se convocaron en el metal de A Coruña

Movilización durante una de las siete jornadas de huelga que se convocaron en el metal de A Coruña

El metal está en lucha. Bizkaia es el último territorio donde CCOO ha convocado huelga para dejar de perder. El 27 y el 28 de octubre sus trabajadoras y trabajadoras secundarán el paro. Si la patronal no cambia de actitud, las y los metalúrgicos vascos también acudirán a la huelga el 2 de noviembre. Otros siete días de paro había convocado el sindicato en la provincia de Barcelona. Ayer se alcanzó un preacuerdo que desconvocó la protesta. También hubo entendimiento en el metal de Navarra. Sin duda, la presión de todo el sector favorece los acuerdos. Se vuelve a confirmar que los costes de la inflación no pueden recaer solo en la clase trabajadora. Ya se trasladaron al precio de los productos, aumentando los beneficios empresariales. 

Es necesario un reparto justo. CEOE y CEPYME deben sentarse de nuevo a negociar el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) para que los convenios colectivos garanticen salarios dignos. Las patronales tienen que aceptar incluir cláusulas de revisión salarial que permitan que las personas trabajadoras mantengan el poder adquisitivo. Para conseguirlo, nos organizaremos y movilizaremos. El 3 de noviembre llenaremos las calles de Madrid para reclamar el desbloqueo de la negociación colectiva y la garantía para los salarios. El metal demostró que es posible.

La ola de protestas en este sector arrancó en Cádiz en noviembre de 2021, con nueve días de huelga y grandes movilizaciones, que consiguieron sus objetivos, subidas salariales que recuperaron el poder adquisitivo y referencia al IPC para las revisiones. Continuó en el metal de Barcelona, ante la negativa de la patronal a cumplir lo firmado en convenio y actualizar las tablas con el IPC de 2021, el 6,5%. Fue necesario judicializar el asunto para conseguir que cumplieran con lo pactado.

Y desde mayo de este año se han ido sucediendo las protestas a lo largo del territorio, ante las posiciones intransigentes de la patronal. Tras el metal de Cantabria, con veinte de días de huelga, llegaron A Coruña con siete, Ourense con 16 y Araba con cuatro. En el metal de Madrid los sindicatos convocaron una asamblea, donde advirtieron de que convocarían movilizaciones si el convenio seguía bloqueado. Los últimos en sumarse a la protesta fueron el metal de Tarragona y Barcelona. En los dos casos, se consiguió llegar a un acuerdo tras la convocatoria de huelga.

Todos estos convenios recogieron subidas importantes, pero lo fundamental fueron las cláusulas que garantizaban el poder adquisitivo de los salarios, además de reducciones de jornada, mejoras de permisos retribuidos o garantías para la subrogación.

La negociación colectiva es una herramienta necesaria para repartir la riqueza que generan las empresas. En estos momentos de incertidumbre, tras la pandemia y la guerra en Ucrania, es más necesaria que nunca. Está claro que no todos los agentes sociales lo vemos de la misma forma. CEOE y CEPYME abandonaron la mesa de negociación del V AENC en mayo y, desde entonces, bloquean cualquier intento de retomarla. Además, en sus declaraciones públicas se niegan a que los convenios contengan cláusulas de revisión salarial con referencia al IPC, que garanticen a trabajadores y trabajadoras no perder poder adquisitivo.

Las empresas españolas alcanzaron beneficios superiores a los previos al COVID. El Banco de España lo confirmó en su último informe. Sin embargo, con la inflación en el 8,9%, los trabajadores y las trabajadoras están viendo cómo sus salarios sufren la mayor caída en décadas. La subida salarial media que se pactó en septiembre fue del 2,61%, aunque mejora algo en los sectores industriales, donde es del 3,18%. Mucho tiene que ver la lucha que están llevando a cabo las personas trabajadoras del sector del metal, que demuestran que la organización, la movilización y la lucha son imprescindibles para conseguir mejores condiciones laborales.

#SalarioOConflicto