CCOO de Industria | 23 febrero 2025.

Sordos al peligro del ruido

  • La Federación distribuye la ?Guía básica para la prevención del riesgo de exposición al ruido?
  • Un 30% de la población trabajadora está expuesta a ruidos que superan los 85 decibelios
  • Puede provocar pérdida de capacidad auditiva, sordera, pitidos en los oídos, trauma y shock acústico?

El ruido es probablemente uno de los riesgos laborales más extendidos y menos considerados, alerta la ?Guía básica para la prevención del riesgo de exposición al ruido?, editada por la Secretaría de Salud Laboral del sindicato en colaboración con la Junta de Castilla y León, que la Federación de Industria de CCOO de Castilla y León está distribuyendo por toda la Comunidad.

13/08/2012. Valladolid
Cartel de seguridad en una obra

Cartel de seguridad en una obra

Los expertos calculan que "un 30% de la población trabajadora está expuesta a ruidos que superan los 85 decibelios. Tras 35 años de exposición a ese volumen, al menos un 9% de los trabajadores y trabajadoras presentará sordera profesional, mientras que, para una exposición a 90 decibelios en el mismo periodo, aumenta al 20%".

Con estos datos, ¿a qué se debe la falta de atención a este peligro? La guía apunta a que a menudo el ruido no se identifica como riesgo. "O bien no se hacen las evaluaciones de riesgos o no se hacen de manera adecuada o no se descubre el daño durante la vigilancia de la salud".

Otra causa de esta dejadez viene derivada de la "tolerancia cultural". Y es que el ruido "está demasiado aceptado tanto laboral como socialmente".

A esta permisividad contribuye su daño "invisible", ya que las consecuencias a la exposición a un nivel perjudicial de decibelios "se manifiestan progresiva y lentamente. En ocasiones, incluso cuando el trabajador ya ha abandonado la actividad que originó la enfermedad".

Por ello, Industria de CCOO considera que tomar conciencia del problema del ruido es el primer paso para comenzar a reducir la exposición como mejora de nuestra salud y calidad de vida tanto laboral como personal.

El impacto del ruido sobre la función auditiva es el efecto mejor documentado. Puede provocar pérdida de capacidad auditiva, sordera, pitidos en los oídos, trauma y shock acústico?

Las alteraciones producidas no se limitan al oído con efectos sobre los sistemas motor, vegetativo, endocrino, inmunitario y neurológico del cuerpo humano. Así, una de las consecuencias más habituales es el aumento de la frecuencia respiratoria, que vuelve a su normalidad cuando cesa la exposición.

Además, puede causar hipertensión arterial, arteriosclerosis, úlceras gastroduodenales, aumento de la acidez, alteraciones en la visión, modificaciones en el normal funcionamiento de diversas glándulas como hipófisis, tiroides, suprarrenales? Y, por supuesto, la aparición de disfonía en aquellos trabajadores que deben elevar la intensidad de la voz para mantener la comunicación verbal con otros.

Protección especial merecen las embrazadas, ya que su exposición está relacionada con disminución del peso, aumento de mortalidad, mayor irritabilidad en el recién nacido y, cómo no, disminución de su capacidad auditiva.