CCOO de Industria | 23 febrero 2025.

El creciente número de fallecidos en el accidente minero de Turquía lo convierte en una matanza

    IndustriALL Global Union, y sus organizaciones afiliadas, están muy afligidas por la muerte de cientos de mineros en Soma, provincia de Manisa, al oeste de Turquía. En estos momentos, 205 mineros han fallecido y más de 80 han sido hospitalizados. La operación de rescate continúa para salvar a los cientos de trabajadores que todavía se encuentran atrapados bajo tierra. El oxígeno está siendo bombeado al interior de la mina, aunque las esperanzas disminuyen.

    14/05/2014. Ginebra

    La mina siniestrada pertenece a una empresa privada cuyos trabajadores están afiliados a Maden-İs, el Sindicato de Mineros de Turquía, organización que forma parte de IndustriALL Global Union. Alrededor de 800 trabajadores se encontraban en el interior y en los alrededores de la mina, cuando un fallo eléctrico hizo explotar un transformador, lo que provocó un considerable incendio ayer a mediodía.

    El fuego provocó un corte de corriente que dejó fuera de servicio las jaulas que transportaban a los trabajadores, que quedaron atrapados a dos kilómetros bajo tierra y a cuatro de la salida. Los trabajos de rescate continuaron durante toda la noche, mientras las familias de los mineros desaparecidos esperan en la entrada de la mina y en el hospital local.

    En Turquía, el registro de medidas de seguridad es muy pobre, por lo que IndustriALL etiqueta el fallecimiento de estos mineros como una matanza. Cada muerte en la mina es evitable y la campaña de IndustriALL para ratificar la Convención 176 de la OIT continuará en Turquía y en cualquier otro lugar del mundo. La presión está ahora sobre el Gobierno de Turquía, que ha sido muy criticado por ignorar las advertencias sobre la escasez de medidas de seguridad, mientras los trabajadores pagaban por sus vidas.

    Nurettin Akçul y Vedat Ünal, presidente y secretario general de Maden-İs relatan que la ráfaga se produjo en el momento en el que se estaba produciendo el cambio de turno en la mina, por lo que es muy difícil conocer cuántos mineros continúan atrapados bajo tierra. Los líderes del Sindicato de Mineros de Turquía confirman que la mina cuenta con la certificación legal necesaria, que todos los trabajadores están cubiertos por la Seguridad Social y que estaban equipados con máscaras de oxígeno subterráneas, pero nadie sabe a ciencia cierta cuánto tiempo pueden mantenerlos con vida en esta situación.

    La tasa de supervivencia en la minería del carbón tras este tipo de explosiones o fuegos es sumamente baja, comparada con otro tipo de explotaciones mineras. Cuando se produce una explosión en una mina del carbón, el rescate debe tener lugar tan rápido como sea posible para asegurarse de que los atrapados sean rescatados con vida. IndustriALL, y todos los que todavía tienen alguna esperanza, confían en que este caso sea la excepción de la norma. El envenenamiento por monóxido de carbono es la principal amenaza para los que están atrapados en el interior de la mina.

    "El Gobierno turco y las empresas tienen la responsabilidad de esta matanza", dijo Kemal Özkan, adjunto a la secretaría general de IndustriALL de origen turco. "Cuando los gobiernos fallan en proteger a sus ciudadanos, no es simplemente irresponsabilidad; es una violación de uno de los deberes fundamentales confiados a cualquier gobierno. Turquía aspira a la grandeza, y esto puede alcanzarlo: pero no a costa de las vidas de los trabajadores".

    Según las cifras oficiales, en 73 años más de tres mil mineros han sido matados en Turquía. Observamos la agitación sabiendo que este accidente tiene todo el potencial para ser el peor. Es suficiente. El gobierno de Turquía debe actuar ahora, los mineros de mi país no pueden seguir pagando con sus vidas para su inacción en minas peligrosas?, señaló Özkan.