CCOO de Industria | 5 febrero 2025.

Actualización del nomenclator en el textil-confección

    Ramona Parra, que conoce muy bien los esfuerzos que se han tenido que hacer en la industria para avanzar en la igualdad real entre hombres y mujeres, cuenta la experiencia que se vivió en el textil para tratar de eliminar la brecha salarial entre trabajadores y trabajadoras.

    05/03/2015.

    Desde principio de los años 90, el Sindicato Textil de CCOO inició los trabajos de campo, visitando cerca de 50 empresas, comprobando en cada puesto las operaciones que realizaban visualizándolas, contrastándolas con las maquinistas. Estos y otros muchos elementos fueron los medios con los que  contamos para  evaluar el trabajo de igual valor.

    EI proceso se alargó casi ocho años. Partíamos de grandes diferencias con la patronal. Con el tiempo, y muchas discusiones, se fueron superando y en el año 1997 se llegó al acuerdo. En el año 1998 se incorporó al Convenio Textil-Confección  la nueva clasificación profesional. Más de 300 categorías profesionales que había en la confección, menos algunas que se  eliminaron, se recogieron en los siete grupos profesionales.
     
    ACTUALIZACIÓN
     
    Formaba parte del texto de la antigua Ordenanza y cuando decidimos incorporarla al convenio, se acordó, patronal y sindicatos, revisar la clasificación profesional que en algunos casos no se correspondía con las tareas actuales. Esa ordenanza tenía más de medio siglo de vigencia.
    Yo voy a comentar lo que hicimos en el sector de la confección. Visitamos 50 empresas, donde se fabricaban distintos productos.

    Analizamos las tareas que se realizaban por departamentos y secciones del conjunto de las fábricas, teniendo en cuenta el producto que se fabrica en cada una de ellas.

    ESTRUCTURA DE FÁBRICA

    - Diseño, Patronaje, Marcada y Corte.

    - Fabricación: Las maquinistas, en cadena, van realizando las  distintas operaciones hasta finalizar la prenda, con  revisiones intermedias, revisión final, plancha,  empaquetado y almacén. Este es un breve repaso para describir el proceso productivo.

    ¿Que nos planteamos desde el sindicato? Formamos un equipo para desarrollar este trabajo con la participación sindical de mujeres de la confección.

    Llevamos una encuesta a la mayoría de las empresas para que cada persona la rellenara explicando en qué consistía su trabajo.

    Al analizar los resultados de estas encuestas, comprobamos que las mujeres, en general, no daban valor a las funciones que realizaban, se infravaloraban, a la inversa que sucedía con los hombres, que las valoraban bien y en algunos casos con exceso.

    Estudiamos los manuales que había al uso y consideramos que no nos servían para hacer la valoración en este sector.

    Contrastamos los criterios y documentos que sobre el trabajo de igual valor se estaban debatiendo en la Federación y Confederación de CCOO, para abordar junto con los resultados de las encuestas la negociación con la patronal,  teniendo en cuenta los diferentes factores a considerar.
     
    AUTONOMÍA

    Para la patronal, la maquinista no tiene ninguna, ellos dan el método, el tiempo y los movimientos.

    Para nosotras, la autonomía es plena, tienes que manejarte con tejidos diferentes, como la seda, el punto, esto requiere cambios de agujas, hilos, si son de algodón o poliéster, si hay que estirar o embeber el tejido, casar cuadros, etc..

    RESPONSABILIDAD

    La patronal todo lo remite a los mandos intermedios. Nosotras tenemos muy en cuenta que se trabaja con tiempos medidos, a destajo, todo tiene que ir con mucha precisión para llegar a la calidad final de exigencia requerida.

    FORMACIÓN

    Las maquinistas, en general, no venían de escuelas profesionales, la mayoría su formación era la práctica de la costura familiar. Entraban como aprendizas, pasando de maquina en maquina y con los años llegaban a ser unas buenas profesionales. En nuestra valoración se consideró la experiencia y el conocimiento del oficio.

    INICIATIVA

    La patronal vuelve a repetir que todo está fijado en las normas y en el método de trabajo.
    Nosotras consideramos que las incidencias que resolvemos  sobre la marcha durante la jornada, son diversas y de distintas dimensiones, entretelas mal pegadas, piquetes que no coinciden, tejidos muy delicados o muy pesados  (la moda es muy cambiante y eso no lo resuelve el método).

    COMPLEJIDAD

    La patronal dice "coser a máquina no es complejo". Nosotras valoramos tareas repetitivas, destreza manual, coordinación de movimientos, precisión, atención visual, esfuerzo físico, etc.
    La patronal decía que esas cosas no se valoraban, ¿qué de donde sacábamos esas técnicas?
    Aquí aparecieron las primeras y grandes diferencias entre los trabajos técnicos de la patronal y los del sindicato de CCOO.

    Para la patronal, casi todas las maquinistas estaríamos en el nivel A, que es el más bajo. Nuestra propuesta  era de nivel C y C2.

    Como hemos descrito anteriormente, la discriminación de las tareas y los factores de las mismas, fueron determinantes a la hora de situar el trabajo de igual valor en el caso de las mujeres.

    La reacción de los hombres fue muy crítica, en la sección de corte, que en su mayoría eran hombres, las tareas de extendido, marcadas y corte pasaban a ser de niveles más bajos que las maquinistas.

    Este fue un motivo más por los que se dilató tanto el llegar a un acuerdo.

    No es lo mismo tener minusvalorado el trabajo de un 75% de mujeres, que sobrevalorado un 25% que representaban los hombres.

    La patronal ya sabía que esto era así, pero no lo quería reconocer.

    Al final se llegó a un acuerdo político, para que se incorporara al convenio el nuevo nomenclator y su aplicación fuera progresiva en el tiempo.

    En los centros de trabajo se irían haciendo los ajustes de las categorías a los grupos profesionales.

    Fue un gran trabajo, con la implicación de la mayoría de delegadas y delegados de CCOO en las empresas.

    La valoración sindical que hicimos en su momento fue muy positiva, analizado a día de hoy creo que mucho más.

    Yo animo a todas y cada una de las delegadas y delegados de CCOO a actuar en nuestro ámbito para eliminar la brecha salarial, ésta es una experiencia, pero puede haber muchas más. Lo importante es ir a la raíz del problema para eliminar la discriminación salarial.

    Espero que esta exposición os pueda servir para el trabajo que tenemos pendiente en CCOO, erradicar la discriminación salarial.
     
    Ramona Parra