CCOO de Industria | 29 marzo 2024.

CCOO rechaza el arbitraje pactado entre UGT y la dirección de Endesa

  • Cree que no es el momento de dejar el futuro de los nueve mil trabajadores y trabajadoras de Endesa a la decisión de un agente externo
  • La decisión se ha tomado cuando se había convocado a la plantilla a secundar una huelga del 11 al 15 de noviembre
  • Varios sindicalistas continuaban encerrados en seis territorios y cuatro centrales

La decisión de UGT, sección mayoritaria en Endesa, de plegarse a un arbitraje pactado con la empresa por el conflicto que la plantilla mantiene desde hace dos años con la dirección de la empresa por la negociación del V Convenio Marco, es rechazada por CCOO y SIE Endesa. Los dos sindicatos consideran que no había llegado el momento de dar un paso que deja en manos de un agente externo el futuro laboral de la plantilla de la empresa eléctrica. No al menos con la negociación en posiciones tan antagónicas y sin que se haya dado tiempo a que la creciente presión que estaban ejerciendo las tres secciones sindicales, y que tan ejemplarmente estaba secundando y amplificando la plantilla, hubiera dado sus mejores frutos.

04/11/2019. CCOO de Industria
Con el apoyo de la plantilla a las movilizaciones, era posible doblegar a la empresa

Con el apoyo de la plantilla a las movilizaciones, era posible doblegar a la empresa

La imagen era anoche desoladora en todas las sedes de Endesa donde se habían desplegado campamentos desde hacía entre una y dos semanas, según cada caso. Delegados de UGT desmontaban las casetas que simbolizaban, junto con las de las otras dos secciones sindicales, la resistencia de la plantilla de Endesa a las inaceptables propuestas de la dirección en la negociación del V Convenio Marco. Los chats hervían de incredulidad y desolación, tanto los de CCOO Endesa como los de SIE y los colectivos de pasivos. Nadie se creía que la traición se hubiera consumado de verdad.

Hasta hoy, los sindicatos habían denunciado que la empresa bloqueaba la negociación y mantenía unas propuestas inasumibles. CCOO y SIE mantenemos la certeza de que con el apoyo de la plantilla a las movilizaciones era posible doblegar el bloqueo de la empresa. Y que si la dirección de Endesa ha aceptado la propuesta de la UGT de pactar un arbitraje, es porque sabe que es una buena noticia para ella.

Con la decisión de UGT de apostar por el arbitraje pactado con la dirección de Endesa, como única salida, sin el consenso de las otras dos secciones sindicales (CCOO y SIE), es probable que terminen unas protestas que hubieran sido las mayores movilizaciones que se recuerdan en nuestra empresa. La decisión, a nuestro juicio, es equivocada y la salida a la situación cómoda pero irresponsable, tanto por el fondo como por las formas, romper la unidad de acción es acabar con el mayor valor de los agentes sociales y los trabajadores. Apostar por el arbitraje pactado por la UGT como solución al conflicto es la enésima –y en este caso, definitiva- demostración de la incapacidad de la sección sindical mayoritaria de resolver el conflicto.

Con una dirección que hace oídos sordos a las reivindicaciones de no precarizar a la plantilla ni recortar sus derechos laborales, la respuesta de las trabajadoras y trabajadores estaba siendo cada vez más contundente y podría haber conducido a hacer entender a la dirección que era necesario un cambio razonable en sus posicionamientos.

El arbitraje pactado por la UGT, deja un panorama de incertidumbre sobre el futuro laboral de la plantilla, que pasa a depender de un agente externo que decidirá sobre los aspectos clave. En este contexto, la dirección de la empresa ha pedido que las secciones sindicales retiren el recurso ante el Tribunal Supremo por la pérdida de beneficios sociales del colectivo de jubilados y prejubilados, entre ellos, la tarifa de empleado. UGT se ha plegado igualmente a esta condición. CCOO y SIE no van a retirar el recurso.

Las mayores movilizaciones

Lo que apunta que será el final del conflicto deja en el aire la que iba a ser la segunda huelga que organizan los sindicatos de Endesa en lo que va de año. El 12 de abril convocaron una huelga de veinticuatro horas y una concentración ante la Junta General de Accionistas. Era la primera ocasión que el evento tenía lugar fuera de la sede central para esquivar las protestas. La dirección no lo consiguió. Semanas antes, se realizó una monumental pitada a la presidenta de Enel (propietaria de Endesa), que impartía una conferencia en la sede del BBVA en Madrid. En 2018 se celebraron movilizaciones en la Embajada de Italia y en la sede de Endesa; boicots a actos de la empresa y protestas ante el despacho del director de Recursos Humanos, que provocó una airada respuesta de la dirección. A estos actos se sumaron unas quince mil personas.

La última escalada de tensión en el conflicto se produjo cuando los secretarios generales de las secciones sindicales de CCOO, UGT y SIE en Endesa comenzaron, el 15 de octubre, un encierro en la sede de Madrid. Desde entonces los encierros se han extendido por los territorios donde opera la eléctrica: Madrid, Barcelona, Sevilla, Las Palmas de Gran Canaria, Zaragoza y Palma de Mallorca. También hay sindicalistas encerrados en As Pontes (La Coruña), Andorra (Teruel), Litoral (Almería) y Compostilla (León), las cuatro centrales que están amenazadas por el cierre.